12 Agosto 2024

¿En qué áreas se desempeña un profesional de la Fonoaudiología?

La Fonoaudiología tiene distintas áreas. Entre ellas:

Área de comunicación infantil

Tiene que ver con la habilitación del lenguaje, habla y la comunicación. Entre ello, en el área del neurodesarrollo infantil en campos laborales como hospitales, centros de rehabilitación (teletón), unidades de fisura labiopalatina, escuelas especiales. La Fonoaudiología en esta área, responde a habilitar la comunicación y el lenguaje en todas aquellas condiciones de salud que pueda tener un niño al momento de nacer o en su infancia.

Por ejemplo, niños con TEA (Trastorno de espectro autista), con parálisis cerebral, síndromes genéticos. El fonoaudiólogo se puede desempeñar en programas referentes al desarrollo del lenguaje y la comunicación de los niños, en centros de salud primaria, secundaria y terciaria.

Área de comunicación del Adulto

En el caso de los adultos, se rehabilita a las personas mayores, y al adulto, que tengan una condición de salud que haya afectado su lenguaje o comunicación, producto de una patología adquirida durante el transcurso de la vida. Habitualmente, nos referimos a condiciones neurológicas que pueden ser transitorias, permanentes o, como las demencias, que empeoran con el tiempo y afectan el lenguaje, la memoria, el pensamiento y la capacidad para realizar actividades cotidianas..

Por ejemplo, cuando una persona sufre un traumatismo encefalocraniano, un accidente cerebrovascular, estas personas quedan con una secuela neurológica. Habitualmente, estas personas son ingresadas de manera aguda en una urgencia, quedando internadas en una Unidad de Cuidado Intensivo. En este contexto, el fonaudiólogo evalúa su condición y secuelas de la comunicación y alimentación para rehabilitar en el contexto hospitalario. Posteriormente, al alta del usuario se debe continuar con la rehabilitación de forma ambulatoria para compensar o reactivar las funciones perdidas y mejorar la calidad de vida de la persona en su entorno social, laboral y familiar.

Los fonaudiólogos también trabajan en diversos centros de adulto mayor (Centro integral de adulto mayor de municipalidades -CIAM) o centros de larga estadía, hogares de ancianos o residencias, en la línea del envejecimiento promoviendo la comunicación de las personas mayores, sus funciones cognitivas y su calidad de vida.

Área de voz

La voz es un instrumento esencial para la comunicación humana, y el fonoaudiólogo es el especialista encargado de cuidarla y optimizarla. En este ámbito, trabaja con personas de todas las edades y condiciones, ayudando a mejorar la proyección vocal, la resonancia, la flexibilidad y la resistencia. Además, brinda asesoramiento sobre el cuidado de la voz en diferentes contextos, como el trabajo, la vida social y las actividades artísticas.

Área de Audiología y Sistema Vestibular

La rehabilitación auditiva es un proceso fundamental para las personas con pérdida auditiva. La fonoaudiología juega un papel clave en este proceso, diseñando y llevando a cabo programas de entrenamiento auditivo que permiten a los pacientes aprovechar al máximo sus habilidades residuales y adaptarse a las nuevas tecnologías auditivas. Además, trabaja en estrecha colaboración con otros profesionales de la salud, como otorrinolaringólogos y educadores especiales, para garantizar una atención integral.

Área de Deglución – Alimentación.

La alimentación es un acto fundamental para la vida y la salud. Cuando existen dificultades para comer y beber, se pueden presentar complicaciones como desnutrición, deshidratación y problemas respiratorios. El fonoaudiólogo especializado en deglución y alimentación trabaja para prevenir y tratar estas complicaciones, mejorando así la calidad de vida y el estado de salud general de nuestros pacientes.

La fonoaudiología en deglución y alimentación aborda dificultades para comer y beber en personas de todas las edades. Trabajamos en diversos contextos, como hospitales (neurología, cuidados intensivos), centros de rehabilitación, escuelas y domicilios. Nuestros pacientes pueden presentar trastornos neurológicos (ictus, traumatismos craneoencefálicos), enfermedades neuromusculares, dificultades oromotrices o dificultades para masticar y tragar debido a tratamientos oncológicos, entre otros. Nuestro objetivo es garantizar una alimentación segura y eficaz, mejorando la calidad de vida de nuestros pacientes.